Uno de los grandes problemas de Alitalia, se ha vuelto a hacer palpable. Y es que, durante años, sino décadas, el gobierno italiano no ha sabido qué hacer con la empresa. Y ahora vuelve a suceder lo mismo: el cambio de gobierno (la salida de Conti y el arribo en su lugar de Draghi), ha supuesto un nuevo cambio de planteo. Aparentemente, el flamante gobierno italiano no está dispuesto a refundar Alitalia como empresa estatal. En cambio, se ha reflotado la posibilidad de que asuma el control de la empresa la alemana Lufthansa, una verdadera experta en el tema, que ha tomado el control de empresas de similares características en Austria, Bélgica y Suiza (Austrian Airlines, Brussels Airlines y Swiss, respectivamente) y que ya en el pasado se manifestó interesada. Sin embargo, el panorama del 2021 dista mucho del pasado. En principio, la alemana sólo invertirá si accede a una Alitalia saneada. Por otra parte, el grupo alemán recibió rescate de los gobiernos de Alemania, Austria, Bruselas y Suiza. Y, de hecho, el gobierno germano tomó el control del 25% de las acciones. Esto supone que su disponibilidad de fondos es limitada o cuando menos, más controlada. Lufthansa ahora está luchando por su propia supervivencia como para pensar en asumir una aerolínea como Alitalia. La alemana no podría quedarse con más del 10% de ninguna otra aerolínea en el mundo mientras no devuelva al menos el 75% de la recapitalización que le ha dado el gobierno.
