El lunes pasado el fabricante europeo celebró el quinto aniversario de la llegada de un nuevo miembro de su familia y convertido oficialmente en el A220, una incorporación estratégica que ha permitido a la compañía ofrecer la gama más completa de aviones comerciales del mercado.
Hoy, con más de 260 aviones en servicio, la flota A220 ha viajado más de mil millones de kilómetros y ha conectado a más de 90 millones de pasajeros en todo el mundo. Volando en más de 1100 rutas, que van desde 30 minutos hasta 8 horas, gracias a la gran versatilidad del avión, a más de 375 destinos en todo el mundo. Esta pequeña pero poderosa aeronave ofrece un 25 % menos de consumo de combustible y emisiones de CO2 en comparación con las aeronaves de la generación anterior.
Desde que se unió a la Familia Airbus en julio de 2018, el A220 ha desplegado significativamente sus alas. En los últimos cinco años, este avión que ha cambiado el juego ha duplicado con creces su cartera de pedidos y ha multiplicado por más de cinco su número de operadores en todo el mundo.
El importante crecimiento del A220 durante los últimos años ha sido posible gracias a que los medios industriales del Programa se han reforzado sustancialmente. Optimizados con la incorporación de una línea de montaje final en las instalaciones de Airbus en Mobile, Alabama, EE.UU. en 2020 y una línea de submontaje en la sede del Programa Airbus A220 en Mirabel, Quebec, Canadá en 2022. Estas inversiones han permitido acelerar el ritmo de producción del A220, confirmando que el Programa va por buen camino para alcanzar su capacidad máxima de producción de 14 aviones al mes hacia mediados de la década.
Hace tiempo que se viene hablando de la posibilidad del surgimiento de una nueva versión, conocida como A220-500. Según fuentes de la compañía, los cambios serán tan trascendentales que adoptaría identidad propia como Airbus A221 y capacidad para 170 pasajeros. ¿será?
