Con el objetivo de renacer bajo el conglomerado Tata Group, la compañía estudia un ambicioso encargo de aeronaves con Boeing y Airbus.
Las versiones indican que los pedidos incluirían hasta cuatrocientos aviones de fuselaje angosto (confirmados 150 737MAX) y hasta 100 o más aviones de fuselaje ancho, incluidas docenas de Airbus A350 y Boeing 787 y 777.
Tal acuerdo podría superar un valor de los US$ 100.000 millones de Dólares a precios de catálogo, incluidas las opciones, y clasificarse entre los más grandes de una sola aerolínea en términos de volumen, eclipsando un pedido combinado de 460 aviones Airbus y Boeing de American Airlines hace más de una década.
El posible pedido se produce días después de que Tata Group anunciara la fusión de Air India, Air India Express y Vistara Airlines, una empresa conjunta de Tata Group y Singapore Airlines, para crear una aerolínea de servicio completo más grande y fortalecer su presencia en los cielos nacionales e internacionales. Ese acuerdo le da a Tata Group una flota de 218 aviones, consolidando a Air India como la aerolínea internacional más grande del país y la segunda más grande en el mercado nacional después del líder IndiGo. La compra de Air India, endeudada, también le ha dado a Tata Group acceso a valiosos derechos de vuelo y slots, especialmente a destinos en los Estados Unidos y Europa.
Boeing ha dicho que entregará 50 de esos aviones en marzo de 2023, lo que quiere decir que son aviones ya construidos y que estaban pendientes de que sus clientes los recogieran. Son, efectivamente, los aviones comprados por China Southern, que no se ha hecho con ellos porque el gobierno chino sigue sin certificar las correcciones hechas en el modelo Max, tras los dos accidentes.
