Desde Mendoza, primer destino internacional en Argentina y primer destino de cabotaje cuando la empresa abrió su filial en el país hace tres años, los directivos de JetSMART anunciaron la incorporación de un sexto avión a la flota, con lo que confirmaron la continuidad de su plan de crecimiento e inversión en el país. Según los directivos, la llegada de este avión significa un desembolso superior a los $60 millones de dólares, más puestos de trabajo y un nuevo esfuerzo para la recuperación del sector aerocomercial de Argentina y de las economías regionales. Esta, que parece una buena noticia para los viajeros y el país, ¿lo es también para los funcionarios de turno?
“El compromiso de JetSMART con Argentina es claro y constante desde el primer día. La llegada de este avión es una importante inversión, en el contexto de un mercado donde la necesidad de las personas por recorrer grandes distancias en poco tiempo, por un precio accesible, en aviones nuevos, seguros y a tiempo es muy fuerte”, explicó Victor Mejía, Chief Commercial Official de JetSMART.
Según precisó Gonzalo Pérez Corral, Gerente General de JetSMART en Argentina, el avión que lleva la figura de un “Puma Concolor” en su timón de cola, una especie que habita el noroeste argentino, llegará al país a fines de marzo con la idea de comenzar a volar, luego de los trámites pertinentes, el 2 de abril, con la matrícula LV-KDP. “La idea es que este nuevo avión sirva para reforzar y sumar más frecuencias a las 17 rutas que ya tenemos operativas en el país, más que a sumar nuevos destinos. Actualmente, contamos con mucha demanda en los vuelos de cabotaje, por lo que sumar más frecuencias a nuestras rutas para que más gente pueda volar nos parece la mejor opción. Además, con esta incorporación, alcanzaríamos aproximadamente los 1.000 vuelos mensuales”.
Pero operar en la Argentina no es tan fácil, o mejor dicho no te la hacen tan fácil. Por lo pronto, también este avión deberá pernoctar en Ezeiza – ya serian dos amarres que les niegan en el aeropuerto metropolitano– bajo el argumento oficial de que no hay slots disponibles pese a las inversiones y reformas que se hicieron el año pasado y a que hay dos decenas de aviones menos volando, entre las compañías que se fueron del país, las que dejaron de volar y los que Aerolíneas Argentinas tiene en tierra por mantenimiento.
Otro dato significativo – ya lo padeció LAN Argentina en su momento – es que para las low cost no hay disponibilidad de mangas para el embarque y desembarque de los pasajeros –aunque estén disponibles – pese a que pagan la misma tasa aeroportuaria que el resto. ¿No es acaso discriminatorio?, se preguntan
“La llegada del sexto avión es una parte importante de nuestro plan de trabajo. Esperamos poder resolver la cuestión sobre nuestros amarres en Aeroparque que es nuestra base principal, dado que para muchos pasajeros el costo de acceso al Aeropuerto de Ezeiza es superior en algunos casos al costo del pasaje en sí, algo que termina excluyendo a muchos argentinos de la posibilidad de viajar”, reclamaron desde la empresa.
Pero no es cómo operar el nuevo avión en cabotaje desde Ezeiza, lo que más preocupa en este momento a la gente de JetSmart. La amenaza de la entrada en vigencia el Decreto 879, hecho público el 24 de diciembre, en medio de los festejos de Navidad, y diseñado exclusivamente para beneficiar y proteger de la competencia a Aerolíneas Argentinas cuelga no solo como espada de Damocles sobre JetSmart sino también sobre su colega Flybondi. La disposición no solo volvería a implementar las bandas tarifarias, buscando que nadie venda por debajo de una tarifa que habrá de establecer el gobierno en acuerdo con la empresa estatal (exactamente al contrario de lo que hace el Secretario de Comercio, Roberto Feletti, cuando impone precios máximos al resto de los productos) sino también otras medidas proteccionistas. Como por ejemplo, que cuando una aerolínea privada solicite una nueva ruta, nacional o internacional, Aerolíneas debe decir si le interesa o no a ella antes de otorgarla al solicitante, o el regreso al monopolio estatal en los servicios de rampa.
Según explicaron en la empresa, la llegada de este sexto avión permitirá sumar más frecuencias a destinos como Bariloche, Córdoba, Corrientes, Iguazú, Jujuy, Posadas, Salta y Mendoza (que pasaría esta última a tener doble frecuencia diaria) además de reforzar las rutas Neuquén – Salta, Bariloche – Córdoba y Mendoza – Bariloche.
“Trabajamos para poder volver a recuperar la cantidad de aviones que alcanzamos a administrar en El Palomar y Aeroparque tras la compra de Norwegian en diciembre de 2019 (siete), cuyo proceso de recambio se vio pausado por la pandemia y la imposibilidad de operar durante varios meses. Argentina necesita que haya más aviones, más oferta y mayor conectividad para que la actividad económica pueda crecer en forma constante”, concluyó Pérez Corral.
