Cancelaciones y demoras en Aerolíneas Argentinas I

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Una absurda discusión se generó la mañana del viernes 9 de abril entre la empresa y los directivos de APTA por establecer de quien es la responsabilidad por las cancelaciones y demoras de la aerolínea estatal en Aeroparque, justo el primer día de entrada en vigencia de las nuevas medidas frente la segunda ola de Covid-19.

Demoras que generaron algunas aglomeraciones en el aeropuerto porteño.

Mientras que la mayor parte de los vuelos comenzaban a reprogramarse para después del mediodía, con las consecuentes demoras en los regresos y por los enganches, la empresa responsabilizaba a la Asociación del Personal Técnico Aeronáutico (APTA),  de llevar adelante una “medida de fuerza encubierta”.

Ricardo Cirielli, secretario general de APTA,  no solo negaba la acusación sino que además ponía en ridículo a la empresa al sostener que lo que sucedió fue que el único radioperador del turno (despachante operativo que se comunica con las tripulaciones en vuelo) no fue a trabajar por estar enfermo, más exactamente con síntomas de Covid.

La operación recién comenzó a regularizarse al mediodía (una forma de decir, ya que las demoras se extendieron a lo largo de toda la programación por los enganches)  a raíz de haber convocado la empresa al radioperador del turno tarde para que adelante su ingreso.

¿Puede una empresa del tamaño de Aerolíneas depender de una sola persona en un área tan sensible, capaz de paralizar la operación?  ¿No debería contar con algún otro sistema de reemplazo ante una eventualidad, como lo hay en otros sectores operativos?

El tema no es nuevo. Lo mismo ocurrió el 12 de noviembre de 2019, cuando a la empresa la presidía Luis Malvido, cuando imprevistamente faltó un operador de radio. También entonces la empresa responsabilizó al sindicato.

Según Cirielli: “esto lo debería explicar la empresa. No hay dotación”.

Justamente ese miércoles, el gremio había hecho público un reclamo para que se hagan testeos urgente y periódicos de Covid 19 a todo el personal del área técnica y de despacho de aeronaves, y se respete el estricto cumplimiento de todos los protocolos empresariales de bio seguridad, para prevenir la infección en los lugares de trabajo.

Entre otras cosas, el gremio sugiere que la empresa utilice, para quienes trabajan en Aeroparque y Ezeiza, los centros de testeos allí dispuestos para los pasajeros.

1 Comentario

  1. Otra verguenza más. No se concibe que con la enorme cantidad de empleados con que cuenta AR (es muy posible que debe encabezar la nómina de líneas aéreas a nivel mundial con la mayor relación flota de equipos vs cantidad de empleados) se dependa de UNA PERSONA…!!! y de alguna manera el «atornillado» (término muy utilizado por actuales funcionarios del gobierno nacional) de Cirielli le echa la culpa a la empresa. Es una autentica película de terror.

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