Mientras sigue a paso firme el proyecto alemán para la creación de un nuevo avión, derivado de lo que fuera tiempo atrás el turbohélice Dornier 328, la Fábrica Argentina de Aviones (FAdeA) sumará su “granito de arena” tras la firma con la empresa brasileña de ingeniería aeroespacial y de defensa Akaer para proveer de piezas y conjuntos para el programa D328eco de Deutsche Aircraft.
El contrato garantizaría 15 años de trabajo en la industria aeronáutica internacional y que permite a FAdeA ampliar sus ingresos fuera de sus compromisos con el Estado. «Este contrato es un hito en nuestro camino de expansión internacional y un paso clave para aumentar nuestra facturación con nuevos clientes fuera del Estado. Nos enorgullece ser parte, a través de Akaer, de la red de proveedores de este prestigioso programa», expresó el presidente y CEO de FAdeA, Julio Manco.
Para el proceso de fabricación la empresa recurrirá a proveedores locales de moldes y dispositivos.
La empresa alemana tiene previsto una producción de 500 unidades del D328eco, que tendrá motores Pratt & Whitney Canada PW127XT-S. Tiene prevista una autonomía de 1.000 kilómetros con carga máxima, operando a una altitud de hasta 30.000 pies, y podrá despegar y aterrizar en pistas de al menos 1.000 metros, con una velocidad de crucero de 543 km/h. También se está trabajando en una versión STOL (Short Take-Off and Landing) para pistas de 800 metros.
