La aerolínea belga informó que suspenderá sus operaciones a partir del próximo 3 de octubre de 2023, asegurando que todos los vuelos programados hasta esa fecha operarán con normalidad.
El último servicio de pasajeros será un vuelo proveniente de Ciudad del Cabo.
La compañía fue creada en mayo de 2016 por empresarios belgas con el objetivo de conectar el país con Asia y Oriente Medio y empezó a operar el 2017.
Tras una serie de acontecimientos externos que han debilitado a la empresa en los últimos años (Covid, la guerra en Ucrania, el aumento de los precios del combustible, la inflación y la caída del poder adquisitivo de los consumidores), y en vista de la actual inestabilidad del entorno socioeconómico y geopolítico, el Consejo de Administración de Air Belgium ha decidido revisar la estrategia de desarrollo de la empresa, según informó en un comunicado.
La compañía “quiere concentrarse de ahora en adelante en sus dos actividades B-to-B generadoras de crecimiento, a saber, carga y ACMI para pasajeros y vuelos de carga y discontinuar su propio negocio de pasajeros, que frente a una mayor competencia está demostrando ser crónicamente no rentable hasta la fecha”, añade.
Para hacer frente a su deuda actual y recuperar la rentabilidad, el Consejo de Administración de Air Belgium ha presentado un recurso judicial de reorganización mediante acuerdo amistoso.