Desde hace unos días los gremios aeronáuticos – APA, UPSA, APLA y APTA – vienen discutiendo una recomposición salarial que compense la inflación. El diálogo, pese a las medidas de fuerza que ocasionaron demoras y molestias a los pasajeros, en ningún momento se interrumpió. La última reunión fue este miércoles donde la empresa reiteró su propuesta de un 8%, más el compromiso de reabrir el diálogo una vez se conozca el índice de inflación del mes. La propuesta fue rechazada por el gremio de pilotos, quienes solicitaron un 12% de recomposición.
Además, convocaron a asambleas informativas en lugares de trabajo – también lo hicieron APA y UPSA en Aeroparque – lo que derivó, según la empresa, en 70 vuelos demorados y más de 8000 pasajeros afectados. Pero al no haberse llegado a un acuerdo en la reunión del miércoles a la mañana, las demoras se reiniciaron afectando a otros 30 vuelos, la mitad con partidas desde Aeroparque.
APLA trató de despegarse de estas demoras alegando que fueron “solo reuniones informativas”.
La empresa, por su parte, se ocupó de aclarar que la misma ha cumplido con los acuerdos anteriores, ajustando los salarios de acuerdo a la inflación acumulada durante el último año, estando los salarios actualizados y equiparados hasta julio inclusive. La discusión sería por agosto.
En un comunicado, APLA fijó su posición acusando a los directivos de que, “en un año de pleno crecimiento con números sin precedentes para la empresa, están generando una situación innecesaria al mantener una postura intransigente que impide avanzar en un acuerdo de recomposición salarial acorde a los aumentos continuos en el costo de vida que pagamos día a día. Ante esta realidad, resulta indispensable un cambio de actitud de los directivos de Aerolíneas Argentinas a la brevedad para destrabar la presente discusión paritaria”.
Por último, la empresa convocó a los representantes gremiales para una nueva instancia de negociación que tendrá lugar el próximo viernes.