El gobierno del Estado de Nueva York, anunció que decidió renunciar a la construcción de una nueva línea ferroviaria que enlazara con el aeropuerto neoyorquino de LaGuardia. La obra fue valuada en US$ 2.100 millones y competían por ella las constructoras ACS y OHLA, de España, Aecom de Estados Unidos y Mitsubishi, de Japón. La decisión de descartar la iniciativa se basó en el informe elaborado por una comisión de expertos conformada a pedido de la gobernadora Kathy Hochul y que propuso como una alternativa más económica, incrementar el número de buses y vincular con ellos la estación del metro existente, con el aeropuerto situado en Queens. “Acepto las recomendaciones del informe y espero que sea implementado inmediatamente por parte de la Autoridad Portuaria en estrecha coordinación con nuestros socios de la Administración de Transporte Metropolitano, la ciudad y el gobierno federal”, aseguró Hcochul en un comunicado. El plan, en realidad, había sido propuesto por el gobernador Andrew Cuomo (2011/2021), tenía un costo inicial de US$ 450 millones, y sería similar al tren aéreo que conecta el otro aeropuerto neoyorquino, el JFK con la red de metro de la ciudad.