Después de los dos vuelos de Aerolíneas Argentinas que arribaron a Buenos Aires el domingo y el lunes, y el de Lufthansa del miércoles, trayendo desde Beijing entre los tres un millón de dosis de la vacuna Sinopharm, un nuevo A330-200 de la aerolínea estatal partió este martes a las 12:50 a buscar otro millón de dosis de la vacuna producida por el “China National Pharmaceutical Group Corp”. Al cierre de Aviación News, también la empresa se preparaba para despachar en la madrugada del jueves su decimotercer vuelo a Rusia para traer vacunas Sputnik V.
El último domingo arribó a Ezeiza un vuelo de Aerolíneas Argentinas, procedente de Beijing y escala en Madrid, trayendo 384.000 dosis de la vacuna Sinopharm y el lunes otro vuelo transportando otras 371.200 dosis del mismo producto. El remanente, hasta completar un millón de dosis (244.800), llegó este miércoles en un vuelo de Lufthansa desde la capital China, con trasbordo en Frankfort.
A diferencia de los dos últimos vuelos de Aerolíneas y de la compañía alemana que en conjunto trajeron un millón de dosis, el vuelo que estaría llegando este jueves, el quinto de la compañía a Beijing, traería el solo un millón de dosis, con el consiguiente ahorro en costos de logística. La diferencia está en el envasado; si cada vial (frasco destinado a contener medicamentos inyectables) contiene una dosis o si en cada vial van tres. Obviamente la urgencia por contar con vacunas hace que el gobierno argentino acepte el envasado que haya disponible, aunque eso triplique el costo de traslado. “Urgencia mata billetera”.
Con este millón que trajo este jueves el vuelo AR 1050, ya serían cinco los vuelos a China de Aerolíneas y 4 millones las dosis de la vacuna Sinopharm recibidas hasta ahora, sumando los traslados de KLM y Lufthansa. Y con el nuevo vuelo a Moscú, serían trece los traslados y – sin contar las del vuelo del sábado – 5.3 millones las dosis de la Sputnik V ya en el país.