¿En que quedaron los grandes anuncios de Pablo Ceriani y La Cámpora en 2023?

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En una reunión la semana pasada las autoridades de Aerolíneas Argentinas habría decidido dar marcha atrás con los nuevos uniformes, aquellos diseñados por Benito Fernández que había recibido no pocas críticas. Presentación que fue parte del show de Pablo Ceriani y La Cámpora para aumentar el relato de “una gestión exitosa” que buscaba dejar su marca.

Concretamente, se habría descartado la posibilidad de emitir una orden de compra que ponga en marcha el reemplazo de los uniformes de todo el personal.

La decisión estaría generando algunos inconvenientes operativos ya que al programarse nuevos uniformes para el 2024, se habrían dejado de producir los anteriores por lo que los que quedan en stock no son, exactamente, los talles más demandados.

En junio del año pasado, Aviación News tuvo la primicia de una presentación interna de los uniformes diseñados por Fernández. En septiembre, se presentaron finalmente los distintos modelos, con algunos cambios respecto a los bocetos anteriores. Allí se conoció que las zapatillas, con los logos y colores de la empresa, era una propuesta de Ricky Sarkany.

Si bien no se confirmó – tampoco se desmintió – Fernández habría facturado por su trabajo creativo U$S 250.000, no así Sarkany que no habría cobrado honorarios.

No fue el único proyecto de la administración Ceriani que haya quedado nada más que en anuncios de campaña.

También quedaron en el camino, por ejemplo, los vuelos a con A330 desde Aeroparque a Miami y Nueva York, un proyecto que demandó la construcción de una plataforma y obras tanto en el sector aéreo como en el de pasajeros.

La primera etapa de la obra había demandado una inversión de $4.000 millones de aquel entonces, la que había sido inaugurada en un acto del que participaron el ministro de Transporte de la Nación, Diego Giuliano; el presidente del ORSNA, Carlos Lugones Aignasse; su vicepresidente, Fernando Muriel, y el CEO de AA2000, Daniel Ketchibachian, entre otros funcionarios y empresarios del sector. Al finalizar la obra proyectada la inversión rondaría los $7.800 millones.

Aún no está claro por qué Aerolíneas o las autoridades nacionales de entonces no lograron las autorizaciones de los organismos de Estados Unidos para estos nuevos vuelos. ¿Es la ANAC quien fracasó o Aerolíneas Argentinas? Alguien dijo que se olvidaron de incluir en el trámite a Cancillería.

Lo concreto es que también los vuelos a Estados Unidos desde Aeroparque quedaron nada más que en un anuncio.

Por suerte, las inversiones en el Aeropuerto no son en vano.

Otro tema que queda por explicar es por qué los B737-800 que se incorporaron como cargueros, y que dieron lugar a un rimbombante lanzamiento en Ezeiza, están ahora estacionados en una plataforma alejada, justamente en ese mismo aeropuerto.

El proyecto, que incluía la incorporación de dos B737-800 cargueros, con capacidad para transportar 22 toneladas paletizadas dentro de la Argentina y la región, incluía un acuerdo con la empresa Mirgor SA que habría de funcionar como socio estratégico en esta primera etapa de operaciones, ya que la misma utilizaría gran parte de la capacidad carguera de las nuevas aeronaves para el traslado de componentes electrónico y automotrices desde su principal planta en Tierra del Fuego.

Por último, queda pendiente confirmar – hay quienes dicen que la operación se habría caído – la incorporación de 12 Embraer 195 E2 destinados a reemplazar parte de los actuales E190. El requerimiento (RFP) de Aerolíneas Argentinas para la incorporación y financiación de estos aviones que debían llegar entre el 2024 y el 2026, y cuya oferta debía presentarse a más tardar el 16/08/2023, generó en aquel momento la pregunta de Aviación News de si se trataba “de un anuncio para la tribuna” en plena campaña electoral, o si realmente había intenciones de generar una incorporación de flota a semanas de un cambio de gobierno. La pregunta entonces era si no debían ser las nuevas autoridades, sean del partido que fueran, quienes decidieran un cambio de flota que implicaba un compromiso financiero y una política operativa a largo plazo para la aerolínea del Estado.

Los aviones que pretendía incorporar la compañía son los Embraer 195 E2, más modernos, eficientes, de mayor autonomía y menor consumo, que permitirían una configuración de hasta 139 asientos. ¿Es este el avión adecuado para la ex Austral o se trataba simplemente de una operación impulsada por APLA para que los ex pilotos de la ex aerolínea privada estuvieran siempre un escalón más abajo?