La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) dijo en un comunicado que los precios locales «no reflejan la realidad de un país productor de petróleo», y añadió que los costos del combustible son uno de los principales retos a los que se enfrenta el sector en Brasil.
IATA instó al Gobierno brasileño y a la petrolera estatal local Petrobras a que modifiquen la forma en que se cobra el combustible para aviones en el país con el fin de reducir los costos, que calificó de «excesivamente elevados» en la mayor economía de América Latina.
Petrobras es el mayor productor de petróleo de Brasil y responsable de la mayor parte de la actividad de refinación del país. A principios de cada mes ajusta los precios del combustible para aviones en función de factores como los precios mundiales del petróleo y los tipos de cambio.
«La posición monopolística de Petrobras y los costos administrativos adicionales que cobran los proveedores hacen que los precios del combustible para aviones se inflen artificialmente», dijo Peter Cerda, responsable de IATA en las Américas.
El Ministerio de Minas y Energía de Brasil no respondió inmediatamente a una petición de comentarios.
Petrobras, por su parte, señaló que había bajado los precios en sus refinerías un 6% de promedio a partir del 1 de diciembre, lo que significa que se han reducido un 19,6% en total en lo que va de año.
«Es importante destacar que el mercado brasileño está abierto a la libre competencia y no existen restricciones legales, reglamentarias o logísticas para que otras empresas actúen como productoras o importadoras de combustible de aviación», añadió el gigante petrolero en un comunicado.
