S7 imitó finalmente la decisión de Aeroflot, y también decidió suspender sus vuelos al Exterior. Al igual de la otra gran transportadora, la explicación de por qué se relaciona con las restricciones que se le han impuesto a las aerolíneas y los aviones rusos, como un modo de castigo por la invasión rusa de Ucrania. La decisión se extendió además a una tercera aerolínea rusa, la pequeña Smartavia, que vuela a determinados países del Centro de Asia y opera vuelos chárter a Turquía.