El CEO de la filial brasileña, Jerome Cadier, brindó una entrevista a O Globo donde se mantuvo firme en aclarar que, cuando solo restan dos semanas para la presentación del plan de reorganización de LATAM al Tribunal de Quiebras en Estados Unidos, el único objetivo de Azul es dificultar la salida de Latam del Capítulo 11, llevándola a un proceso más complejo y costoso. “Azul está aterrorizada por la competencia, ya que estamos dejando el Capítulo 11 más competitivos de lo que jamás hemos estado en la historia del grupo” afirmó Cadier.
El ejecutivo agregó que el negocio no cuadra con los plazos del plan de reorganización y que Azul dificulta su salida de la crisis. «Están minimizando las dificultades y el tiempo de aprobación de una operación de este tipo. El juego de Azul está haciendo que sea más difícil y caro dejar el Capítulo 11».
Cadier advirtió que en una eventual aprobación de la propuesta de Azul podría dejar a la empresa en el limbo durante un año, período que las autoridades antimonopolio de Brasil podrían tomar para evaluar el caso, además de pasar por el Departamento de Comercio de Estados Unidos y la Fiscalía Nacional Económica en Chile.
«Es absurdo que Azul defienda una empresa monopólica. Lo que realmente quiere es aumentar las tarifas, ya que tendría menos competencia. Esto es bueno para el accionista de Azul, no para el pasajero», recalcó.
Y, para seguir despejando dudas, remarcó en sus redes sociales:
“…lo refiero categóricamente: LATAM no tiene intención de deshacerse de la operación brasileña. De hecho, todo lo contrario: estamos contratando de nuevo (habrá más de 2.000 incorporaciones este año), tendremos más destinos en Brasil que antes de la pandemia (49 en total, siendo los nuevos Jeri, Vitória da Conquista, Comandatuba, Juazeiro do Norte y Petrolina) y terminaremos el año con prácticamente el 100% de nuestra capacidad recuperada en el país”.
