Al mejor estilo Papa Francisco, el ministro de Transporte Guillermo Dietrich mantuvo una improvisada conferencia de prensa a bordo del Embraer de Austral que inauguró los vuelos entre Buenos Aires y Rio Cuarto. Más allá de la satisfacción por haber inaugurado los vuelos prometidos en campaña, Dietrich habló de la demorada llegada de Avianca, de las inversiones de Andes Líneas Aéreas, de infraestructura, y la amenaza de paro de APLA. Entre lo más destacado que afirmó Dietrich, indicó que “no hay ningún reparo para que ninguna compañía venga y se instale en Argentina. Tenemos subdesarrollado el mercado de cabotaje. Y Aerolíneas lo único que hizo en las últimas décadas fue pisar a cualquier intento de desarrollo que le compitiera. Hay una gran oportunidad de generar más trabajo, de alta calidad, calificado y con buenos salarios si logramos duplicar el cabotaje”. El funcionario sostuvo que en Aerolíneas Argentinas se está haciendo un gran trabajo, por primera vez de manera profesional, trabajando con presupuesto, con control de costos, con análisis ruta por ruta, con mejorar las condiciones comerciales y se está ahorrando este año U$S 100 millones con su plan de trabajo”. (Continúa).
