Gol anunció que espera que este año cierre con un beneficio más exiguo de lo que preveía hacía meses atrás. Y el dato más revelador es que la empresa registró pérdidas al cabo del tercer trimestre. En concreto, Gol registró pérdidas por R$ 1.300 millones (unos US$ 266 millones), una reducción, sin embargo, respecto de los R$ 1.550 millones (US$ 317 millones) del mismo período del año pasado. La revisión de los resultados se emparenta con una reducción prevista del Ebitda de un punto porcentual, pasando del 25% del año pasado al 24%, de 2023. En ese contexto también se redujeron R$ 100 millones (US$ 20,4 millones) las inversiones destinadas a la compra de aviones. “En el mejor de los casos, recibiremos cinco de los aviones a finales de este año y los otros 10 a principios de 2024. Tenemos llamadas con ellos casi todos los días para asegurarnos de que tendremos esta capacidad”, dijo Celso Ferrer, CEO de Gol.
