El camino hacia la venta de Viva Air sumó varios e interesantes capítulos en los últimos días. Luego de la “aparición” de Jetsmart como interesado en hacerse con Viva (y la respuesta de Avianca acusándola de solo buscar entorpecer sus negociaciones), ahora quien se suma a los pretendientes es nada más y nada menos que LATAM.
Desde Avianca declararon que ven la movida de JetSmart con un único objetivo: “utilizar una propuesta, a todas luces inviable, para generar una distracción a la solicitud de integración de Viva y Avianca”. ¿opinarán lo mismo de LATAM? ¿o la verán viable?
Por su parte, Castlesouth Limited, titular de los derechos de voto sobre Fast Colombia S.A.S., operador de Viva Colombia, aclaró que, hasta la fecha, JetSmart no ha presentado ninguna oferta, sino que solo solicitó información para el proceso de “Due Dilligence” sobre Viva.
La mayor sorpresa llegó esta semana, cuando Latam Airlines Colombia manifestó su interés en iniciar negociaciones para adquirir a Viva.
La operación está sujeta a un análisis financiero, el cual tendría la capacidad de realizar de manera expedita, a un eventual acuerdo entre las partes y a las aprobaciones regulatorias correspondientes.
“La filial colombiana del grupo Latam, está preparada y tiene la capacidad para fortalecer sus operaciones en el país. De esta manera, una eventual adquisición de Viva Air Colombia se convierte en una oportunidad de crecimiento ofreciéndoles a los consumidores colombianos la mejor oferta de valor del mercado local en términos de servicio, y al país nuevas alternativas para el fortalecimiento de su conectividad y el desarrollo del turismo”, afirma el comunicado de la línea aérea.
“Por esta razón consideramos que esta potencial operación sería la mejor opción para fortalecer las condiciones de libre competencia, así como ofrecer el respaldo necesario que permitirá responder a la situación financiera de Viva Air Colombia y sus acreedores, lo cual redundará en el fortalecimiento de la industria aérea colombiana”, puntualiza.
Mientras tanto, Viva Air confirmó haber iniciado el Proceso de Recuperación empresarial (PRE) de conformidad con las normas que protegen a compañías afectadas por la crisis del COVID19, con miras a lograr su permanencia en el mercado, a la espera de la urgente definición sobre su futuro. Se trata de un proceso voluntario de recuperación que tiene una duración de 90 días, con el fin restructurar sus deudas a través de una negociación con sus acreedores principales para seguir operando bajo condiciones sostenibles que garanticen la continuidad de la empresa.
Durante esta reestructuración, Viva informó que continuará velando por la continuidad de las operaciones y la prestación de los servicios.
