Al cabo del primer trimestre del año, Air France-KLM registró pérdidas por € 552 millones: muy por debajo de los € 1.481 millones registrados en el primer trimestre de 2021. El resultado operativo fue negativo, también, por € 350 millones, pero también muy lejos de los € 1.179 millones del año pasado. La facturación decididamente se disparó, llegando a los € 4.445 millones y esto se sostiene en que el número de pasajeros transportados se triplicó hasta llegar a 15,58 millones de viajeros movilizados. “El mes de marzo ha sido en particular muy alentador, con un aumento muy significativo en los viajeros de negocios, lo que ha venido a completar una demanda ya fuerte en los viajes turísticos y de visitas familiares”, comentó Benjamin Smith, CEO de Air France-KLM. En función de estas perspectivas, el grupo espera alcanzar una capacidad de entre 80-85% de la que tuvo en 2019. Asimismo, en el tercer trimestre, el porcentaje subirá al 85-90%.
