Desde hace tiempo se sabe que el 15 de octubre será el “Día D”. Alitalia desaparecerá tal y como la conocemos y en su lugar operará ITA. Pero una reunión entre los sindicatos aéreos y las autoridades de la nueva aerolínea generó las primeras rispideces que decantó en una manifestación en el aeropuerto de Fiumicino donde los trabajadores expresaron su descontento ante las condiciones laborales impuestas.
Según la prensa italiana, la disputa surge en el modo de “selección” de los trabajadores que pasarán a la nueva empresa. ITA explicó que convocará con criterios profesionales aplicando el reglamento de la empresa, mientras que los sindicatos quieren tener participación en la decisión y la aplicación del contrato colectivo de trabajo. A su vez, exigen la ampliación de los beneficios salariales para los empleados de Alitalia que no se incorporen a ITA hasta el final del plan industrial de la startup, en 2025.
“No es aceptable que alrededor de 7.500 empleados, que quedan fuera del plan de contratación, pierdan su empleo y no tengan ingresos”, dijo Stefania Fabbri, representante del sindicato Fit-Cisi de la región del Lazio. “Queremos perspectivas sólidas, en cuanto a salarios y reubicación de los empleados”
Según el “Corriere della Sera”, la disputa podría llevar a que ITA posponga su inicio de operaciones recién en marzo de 2022, estirando la vida de Alitalia, aunque se trataría de una medida “extrema” que no contaría con el visto bueno de la Unión Europea.
