Fin de semana de invierno ideal para vivir las sierras y descansar. Caminando por la “avenida principal” (nótese las comillas) uno puede sentirse en cualquier lindo destino de la cordillera patagónica. Paisajes montañosos, chocolates calientes y circuitos comerciales en madera.
Ideal para caminar y perderse por sus calles o directamente sentarse a apreciar la vida en la Sierra. Realizar Ecoturismo o cabalgatas. Y comer…
De ahí el imperdible, la Hostería La Península.
No sé si definirlo como un excelente restaurant que incluye hostería, o un hotel con el mejor restaurante de la Villa.
Buenos precios, atención personalizada y todos siempre predispuestos a ayudar. Pasamos 3 noches en invierno y nos sentimos como en casa, con un calor de hogar que se siente en cada ambiente.
Amplia carta con recomendaciones de sorrentinos (los de queso azul, pera y almendras espectaculares), carnes y guisos. Todo acompañado por una entrada con tapas y Sopa de Verdura y una exquisita mesa de postres. E imperdible el asado al asador de los domingos. Reserven porque se llena!
Desayuno completo para salir con fuerza en la mañana.