La empresa fabricante estadounidense anunció que reducirá la cadencia de producción del B-787 Dreamliner al descubrir un nuevo defecto estructural relacionado con la producción del programa. En definitiva, Boeing planea ahora entregar la mitad del número de aviones programados originalmente, es decir, no más de 50 unidades. Según la agencia noticiosa Reuters, el problema detectado tiene que ver “con las brechas donde se unen los componentes en un mamparo de presión delantero”. “Este problema se descubrió como parte de la inspección en curso de todo el sistema de los procesos de calce del 787 de Boeing requeridos por la FAA”, indicó justamente la FAA. “Aunque el problema no representa una amenaza inmediata para la seguridad de los vuelos, Boeing se ha comprometido a reparar estos aviones antes de reanudar las entregas”, agregó la agencia. Por su parte, Boeing indicó: “Seguiremos tomándonos el tiempo necesario para garantizar que los aviones de Boeing cumplen con la máxima calidad antes de su entrega”. Boeing precisó que entregó 45 aviones el mes pasado, 33 de ellos 737MAX.
