Como un modo de prevenir y anticiparse a la posible llegada de la nueva cepa de Covid-19, Japón decidió cerrar sus fronteras a todos los extranjeros no residentes. La medida, tomada por el ministerio de Relaciones de Exteriores del país se mantuvo vigente desde el 24 de diciembre y hasta el 31 de enero de 2021. Los ciudadanos japoneses y los extranjeros residentes podrán volver a ingresar al país, pero deberán realizar una cuarentena de 14 días. La única excepción aplica a los 11 países con los que Japón llegó a un acuerdo de seguimiento y salud. El cierre se aplica luego de que el propio Primer Ministro nipón, Yoshihide Suga, anunció el lanzamiento de la campaña “Go to travel”, destinada a promover los viajes nacionales. El cierre de fronteras viene acompañado, además, de una restricción sobre los viajes internos, desde el 28 de diciembre y hasta el 11 de enero.
