Boeing concretó el roll-out del Boeing B-787 Dreamliner, en la planta de Carolina del Sur, ante sus empleados y con la asistencia especial del presidente de Estados Unidos, Donald Trump y el gobernador del Estado, Henry McMaster. “Lo que está sucediendo aquí en Boeing South Carolina es una verdadera historia de éxito en Estados Unidos”, dijo Dennis Muilenburg, presidente y CEO de Boeing. “En tan sólo unos pocos años, nuestro equipo ha transformado un sitio verde en una moderna planta de producción aeroespacial que ofrece 787s a aerolíneas de todo el mundo y apoya miles de empleos en los Estados Unidos en el proceso”, agregó el ejecutivo. Boeing entregará los primeros modelos de la versión 10 en 2018, de la que tiene órdenes por 149. Cabe señalar que se trata del más grande Dreamliner de la familia (es 5,5 metros más largo que sus hermanos más pequeños), y está pensado especialmente para cubrir rutas de largo recorrido.