Muy relacionado con los problemas de incendio espontáneo de los Samsung Galaxy Note 7, diversas aerolíneas estadounidenses han decidido tomar medidas preventivas. Entre otras, la adquisición de bolsas plásticas anti-incendios. Tanto Delta, como Virgin América y Alaska Airlines presentaron una bolsa roja capaz de contener celulares y laptops que se sobrecalienten y que puedan llegar a incendiarse. La adquisición en grandes cantidades de estas bolsas habría demandado una inversión de US$ 1.800 y que son capaces de resistir hasta 3.200 grados Fahrenheit. Delta, singularmente, priorizará los vuelos transoceánicos y los de cabotaje que cubren los Boeing B-757, para el próximo año espera en cambio que haya al menos dos bolsas por cada uno de los aviones de su flota.