Como parte del acuerdo entre los diversos partidos políticos representados en el Congreso de Estados Unidos para viabilizar el presupuesto se incrementará la tasa de seguridad que deben pagar los pasajeros en Estados Unidos. El gravamen pasará de US$ 2,50 a US$ 5,60, por vuelo. En la fundamentación, la Administración Obama explica que al monto actual se cubre solamente un 30% de los gastos de seguridad provenientes de la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA). La tasa es válida tanto para los vuelos internacionales que parten desde Estados Unidos como para los servicios de cabotaje.
