Las últimas elecciones en la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA), que reúne a unas 2700 azafatas y comisarios de a bordo, se desarrolló en medio de amenazas cruzadas, denuncias de fraude, jueces yendo y viniendo, y el Ministerio de Trabajo interviniendo descaradamente a favor de una de las listas en pugna. Si bien los candidatos ahora son otros -aunque no tanto-, los intereses son prácticamente los mismos. Por un lado esta la lista oficialista (Lista Verde), encabeza por Silvia Versaggi, que responde al kirchnerista y actual secretario del gremio Ricardo Frecia -instalado allí por Alicia Castro, actual embajadora argentina en Londres- y por el otro la Lista Violeta que postula a Juan Pablo Brey, ligado a la juventud sindical moyanista. Las elecciones, que se extenderán entre el 3 al 12 de junio, definirán si el gremio será un aliado de Mariano Recalde, presidente de Aerolíneas, o engrosará la lista de los sindicatos opositores al Gobierno liderados por Hugo Moyano. Las denuncias de fraude ya comenzaron. Por lo pronto la lista opositora ya denunció irregularidades en la confección de padrones, así como la exclusión de 100 jubilados. También porque muchos tripulantes que respaldan a Brey les modificaron el plan de vuelo para que no estén en el país durante los días de elección. Una curiosidad es que Raúl Otero, coordinador de tripulaciones de la empresa, acusado de «fraude electoral» por favorecer a la lista de Frecia en 2009 y con dos denuncias penales en su haber por amenazar a mujeres durante asambleas de la AAA, fue designado por el gremio como supervisor de las urnas.
