Hay que reconocer que Guillermo Dietrich, ministro de Transporte, siempre puso como ejemplo de aerolínea postergada por el kirchnerismo a Andes Líneas Aéreas que recién el año pasado comenzó a levantar vuelo después de carretear, obligada, durante 10 años. Este lunes, el funcionario no tuvo problemas en madrugar para darse una vuelta por Aeroparque a la salida del vuelo inaugural de Andes a Mendoza. Después de todo, se trata de la única aerolínea que hasta ahora viene cumpliendo con las aspiraciones del gobierno de aumentar la oferta con miras a duplicar el mercado aéreo. Serán dos vuelos diarios de lunes a viernes saliendo de Buenos Aires a las 6:30 y a las 18:15, y desde la ciudad cuyana a las a las 9 y a las 20.45. «Nuestra empresa experimenta el crecimiento más grande desde su nacimiento. Y es un orgullo poder decir que Andes Líneas Aéreas es pionera en Argentina en un nuevo esquema tarifario -el ida y vuelta con impuesto a Mendoza cuesta $ 2.096 finales- y un servicio de vanguardia que crece a medida que nos desarrollamos», dijo Horacio Preneste, gerente general de la compañía. Por las dudas, y pensando en el frente gremial, Dietrich se encargó de dejar en claro que Aerolíneas seguirá siendo «líder» del mercado de cabotaje al descartar que las actividades de Andes o de las otras dos low cost (¿?) habilitadas a operar en Argentina (American Jet y Alas del Sur) puedan afectar a la empresa estatal que, con 10 aviones más, “podría absorber alrededor de 3,8 millones de nuevos pasajeros”.
