La transportadora nipona presentó un informe preliminar sobre el accidente que involucró el choque, en tierra, de uno de sus Airbus A350/900 con un avión de la Guardia Costera, en una de las pistas del aeropuerto de Haneda, el pasado 2 de enero. Según JAL se registró una persona con una fractura de costilla, otra con una contusión en una tibia, otra con un esguince y una última con hematomas. Esto, de un total de 359 adultos abordo y 8 bebés. El avión, matriculado como Juliet/Alfa/13/X-Ray/Juliet (JA13XJ), se perdió en su totalidad producto del incendio posterior que se desató tras el impacto. “Ofrecemos nuestras más sinceras disculpas por las considerables preocupaciones e inconvenientes causados a nuestros clientes, sus familias y todas las partes involucradas. Se brindará plena cooperación en la investigación del incidente”, añadieron autoridades de la aerolínea en un comunicado. “Todos los pasajeros y miembros de la tripulación de nuestro vuelo realizaron con éxito una evacuación de emergencia. Se está brindando apoyo a cada pasajero en cuanto a su condición y asistencia para su regreso a casa. La aeronave no experimentó ningún problema o irregularidad durante su salida del nuevo aeropuerto de Chitose ni durante todo el vuelo”, indicó la aerolínea. “Tras una serie de entrevistas con la tripulación, estos reconocieron y repitieron el permiso de aterrizaje por parte del control de tránsito aéreo, y luego procedieron con los procedimientos de aproximación y aterrizaje. El sistema de anuncios de la aeronave falló durante la evacuación, por lo que los miembros de la tripulación de cabina dieron instrucciones utilizando un megáfono y sus voces. Los miembros de la tripulación de cabina determinaron salidas seguras para la evacuación y todos los pasajeros y miembros de la tripulación fueron evacuados por tres salidas de emergencia. Actualmente, se están investigando información detallada y la causa del accidente, y se brindará plena cooperación con la investigación”, concluyó el texto.
