En Aerolíneas Argentinas y en el resto de las empresas y organismos vinculados con la aviación civil siguen a la espera de novedades. Podría decirse que se ha entrado en una etapa de tensa calma, aunque nadie deja de mirar hacia la puerta para ver quién entra. Todavía hay quienes tienen la esperanza – es lo último que se pierde – en que alguien pueda ser confirmado en su asiento.
Como pasó con la ahora subsecretaría de Turismo donde la número dos del Ministerio, Yanina Martinez, fue confirmada como número uno, aunque dos escalones más abajo y con la, según trascendió, nada grata tarea de reducir un 30% la plantilla.
La espera ahora es que el Presidente y los ministros terminen de acomodar los sectores más críticos para bajar luego a lo que se ha dado en llamar urgencias de tercer nivel. Como Aerolíneas y el resto de los organismos y empresas. Aunque la excepción sería la ANAC donde se menciona a un profesional con muy buenos antecedentes y experiencia en el sector y en el organismo.
Pero claro, la principal incógnita pasa por la aerolínea estatal donde obviamente hay una notoria pausa en cuanto a la toma de decisiones, especialmente en las áreas financieras, comerciales y de recursos humanos.
La única novedad esta semana en la T4 en Aeroparque es el trasladado para este jueves de la Asamblea que había sido convocada para el martes y que tenía como misión tratar las renuncias de los directores, designar los nuevos y aprobar lo actuado. ¿Habrá un nuevo cuarto intermedio?
El otro dato curioso es que ya está semana no aparecieron nuevos nombres de posibles candidatos para ocupar el sillón de Pablo Ceriani, aunque sí versiones sobre cuál podría ser “la salida” para Aerolíneas Argentinas, más creativa, más allá de la posible privatización o el traspaso a los empleados.
Mientras tanto se desinfla cada vez más la ficción de un Balance 2023 – “único en la historia” – con ganancias.
