La Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa), de Brasil, actualizó la normativa contra el virus, y suspendió el límite a la capacidad máxima de ocupación en aviones y ómnibus. Estos cambios entrarán en vigor el próximo 22 de mayo. En definitiva, esto supone una flexibilización de las medidas sanitarias vigentes en los aeropuertos y aeronaves, en respuesta a los actuales indicadores epidemiológicos. Sin embargo, se mantiene la obligación de usar barbijos en los aeropuertos y aeronaves, pero se relajan las demás normativas. En ese contexto se reanuda el servicio de alimentación a bordo y se autoriza a retirar la mascarilla para comer durante el vuelo. Anvisa recomienda, sin embargo, que los servicios a bordo sean breves y recomienda que todos los residuos sólidos generados por el servicio sean recogidos a la mayor brevedad. También se recomienda mantener la distancia física entre pasajeros, siempre que sea posible, aunque sin carácter obligatorio. Anvisa pide también que el mantenimiento de embarque y desembarque por filas se mantenga para reducir las aglomeraciones.
