Una de las características de esta crisis es que ha afectado a la demanda, reduciendo en definitiva el mercado, el número de personas dispuestas a viajar. De modo que, en pocas semanas, el mercado aerocomercial pasó a estar enormemente sobre ofertado. En función de eso las empresas aéreas se vienen reduciendo en tamaño y oferta, pero eso puede no ser suficiente. Allí es donde la posibilidad de concretar fusiones, adquiere otra perspectiva. La analista de la industria Helane Becker, dio la pauta de dos posibles “matrimonios”. En realidad, de un matrimonio y de una fusión a tres bandas. El primero es la posible unión entre United Airlines y JetBlue. Ambas tienen una presencia notable en Nueva York, la low cost particularmente en el aeropuerto JFK. En el segundo caso, Becker insinuó que Allegiant, Frontier y Spirit podrían fusionarse creando una gran low cost. La teoría no está mal, sin embargo, aquí hay impedimentos diferentes. Allegiant está vinculada con Irelandia Investment, mientras que Frontier está respaldada por Índigo Partner. A menos que los dos grupos rivales estén de acuerdo en asociarse, la fusión podría representar la salida de alguno de ellos del mercado estadounidense.
