Tal como estaba previsto, este sábado arribó a Ezeiza, procedente del aeropuerto Internacional Sheremétievo de Moscú, el vuelo AR1601 de Aerolíneas Argentinas transportando una segunda partida de vacunas compuesta por 300 mil unidades de la segunda dosis de la Sputnik V. La duda es como sigue el operativo, el cual difiere entre la mirada optimista del Gobierno canalizada por Página 12, que habrá inclusive de un nuevo vuelo este jueves – desmentido por Aerolíneas –, y hasta tres vuelos por semana, algo imposible para la compañía
El A330-200 matrícula LV-GHQ tocó pista en el Ministro Pistarini las 10:48 del sábado, una hora antes de lo previsto, tras completar una travesía de exactamente 16 horas y 40 minutos.
Al vuelo lo esperaban, además del presidente de Aerolíneas y funcionarios del gobierno, camiones refrigerados de Correo Argentino y Andreani, encargados de transportar la carga hacia los centros de distribución.
Si bien desde el gobierno se hizo circular la noticia de una nueva disponibilidad de vacunas rusas antes que finalice enero – se habla de 4,7 millones de dosis que vendrían de Corea o India más otras 14,7 millones en febrero- no hay aún precisiones por lo que desde la aerolínea estatal solo dijeron estar preparados para nuevos vuelos, pero que estos se irán trabajando – y comunicando – día a día.
Desde Aerolíneas desmintieron que estén preparando tres aviones “para buscar el primer millón de vacunas entre el 21 y el 24 de enero y que la idea sea hacer viajes para transportar esa cantidad cada siete días hasta las 5 millones de dosis como informó Página 12, atribuyendo fuentes de Casa de Gobierno.
En Aerolíneas reconocen que están trabajando para preparar el próximo vuelo – que no será antes del próximo viernes o sábado – apuntando a traer mayor cantidad de dosis por avión para llegar casi al millón de vacunas. Pero por una cuestión logística no es posible operar tres vuelos en una semana porque habría que sacar aviones que están operando en otras rutas e implicaría, demás, “quemar” tripulaciones teniendo en cuenta que van tres tripulaciones por vuelos más un back up – 10 pilotos – lo que implicaría consumir 30 pilotos internacionales en una semanas, lo que no sería muy viable.
De parte de la empresa estatal estaría el compromiso de Ceriani de poner la logística necesaria y armar la operación para que se pueda traer cerca de una millón de vacunas por avión.
El “teléfono descompuesto” parecería estar entre los funcionarios y la empresa. Mientras que los primeros hablan de tres vuelos para traer un millón de dosis en la empresa piensan en casi un millón de vacunas por vuelo.
No se puede contratar un carguero y traer esa cantidad de dósis en un suelo vuelo y ahorrararnos una parva de miles de dólares?