El gobierno belga y la compañía aérea germana llegaron a un acuerdo preliminar para el rescate de Brussels Airlines. El convenio debe ser refrendado por el pleno de la Administración y por la propia Comisión Europea. En definitiva, la compañía recibirá un préstamo del estado por € 290 millones que deberá devolver para 2026. Como contraparte, la propia Lufthansa aportará € 170 millones para completar la financiación. De hecho, unos € 70 millones se destinarán a reestructurar la compañía. El principal motivo de disputa fue la búsqueda de una garantía de que el dinero aportado se quedará en Brussels y no será utilizado a favor de ninguna otra línea aérea del grupo Lufthansa.
