La decisión de la autoridad rusa que todos los aviones de Sukhói deban pasar por una revisión inmediata, complicó las operaciones de Interjet, usuaria de SSJ Superjet 100. De modo que una parte de los vuelos y los servicios de la compañía se complicaron. En ese contexto y mediante la firma de diversos convenios de colaboración con otras líneas aéreas del mercado, Interjet está recibiendo la asistencia de otras empresas aceptando los tickets de los vuelos que no podrán ser operados. En total, Interjet debió dejar en tierra para mantener unas 11 aeronaves. La autoridad rusa encontró microfisuras en los estabilizadores de los aviones Sukhói, aunque no específicamente del modelo SSJ 100.
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