El tráfico aéreo global de carga se desplomó un sensible 0,9% en mayo pasado, según la IATA y comparando con el mismo mes de 2015. Por otro lado, el incremento de la capacidad en un 4,9% supone una presión adicional sobre el rendimiento del sector. Salvo Europa y Oriente Medio, que mostraron crecimientos de 4,5% y 3,2%, respectivamente, el resto de las regiones mostraron un crecimiento plano o descenso en la demanda. “El comercio mundial sigue una tendencia lateral desde finales de 2014, arrastrando consigo al sector del transporte aéreo de carga. La amenaza de la incertidumbre política y económica borra el pronóstico de un 2016 más prometedor. El transporte aéreo de carga juega un papel vital en la economía mundial. Sin embargo, la industria se enfrenta a un panorama complicado y no se ven signos de mejora a corto plazo”, comentó Tony Tyler, director Ejecutivo y CEO de IATA. Una mención singular merece Latinoamérica, que muestra el mayor desplome de la demanda con un 9,7% y una caída también de la oferta del orden del 7%.