El aeropuerto de Hartsfield, que sirve a la ciudad de Atlanta y es uno de los principales hubs aéreos del mundo, ha puesto a prueba un sistema de captura de huellas móvil para pasajeros extranjeros que salen del país. El dispositivo, luego de ser testeado y si pasa positivamente las pruebas, será extendido a los aeropuertos de Chicago, Dallas, Houston, Los Ángeles, Miami, Newark, Nueva York, San Francisco y Washington. El aparato tiene el formato de un smartphone y escanea las huellas dactilares de los pasajeros extranjeros de vuelos seleccionados. La información recabada por el aparato en el momento de que los pasajeros abandonan Estados Unidos es inmediatamente comparada con la de ingreso al país verificando así la identidad del usuario.