Desde el pasado lunes 20 de octubre, los pilotos afiliados al sindicato Vereinigung Cockpit iniciaron una huelga que, en principio, afectó los vuelos de corto recorrido pero que podría extenderse a los de medio y largo. Pese al paro, Lufthansa confirmó que espera poder operar unos 700 del total de 2.150 programados por estos días. De todos modos, confirmó que actualizará la información de cancelaciones y reprogramaciones en su web continuamente. “La prioridad actual de Lufthansa es cuidar de los pasajeros, lo cual incluye la cancelación y cambios de billetes de forma gratuita, la conversión de los billetes de avión de vuelos nacionales en billetes de tren en los casos que se pueda y las devoluciones”, comentaron fuente de la empresa. En tal sentido, la aerolínea envió 60 mil mensajes SMS y 30 mil correos electrónicos a sus clientes. Asimismo, ha reservado 3.800 habitaciones de hotel para atender posibles cancelaciones y ha reforzado el personal de atención en sus call center de todo el mundo para gestionar el volumen de llamadas previsto.