(Cancún, enviado especial) El Director General y CEO de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) dedicó buena parte de su discurso en la inauguración del foro de ALTA a anticipar las consecuencias de la probación del nuevo impuesto a la turbosina en México. Dijo que esta medida traerá un aumento en los costos de los boletos y por consecuencia, una disminución en el movimiento de pasajeros. “A la hora de incrementar los costos en el combustible va a ir directamente al bolsillo del consumidor y al del boleto, y tendrá un efecto directo en el tráfico que es el costo más alto”, dijo Tony Tyler frente a autoridades y periodistas mexicanos. Agregó, además, que no se respeta lo establecido en el acuerdo sobre aviación civil internacional, conocido como Convenio de Chicago, en donde se menciona que los gobiernos no van a imponer impuesto sobre el combustible. “México como otros países de la región no están respetando estos acuerdos. Lo que queremos es que se respeten y se reconozcan las convenciones que han sido acordadas por la OACI”. Tyler anticipó que la aprobación del nuevo impuesto provocaría un impacto de 480 millones de pesos anuales a las aerolíneas del país, debilitando a aún más la competitividad de las compañías locales. A diferencia de otros tipos de combustible, el de la aviación no está sujeto a subsidios, por lo que resulta entre 3% y 7% más costoso cargar en México que en aeropuertos de Estados Unidos”, concluyó.
