La Comisión Europea le dio el visto bueno formal al Plan de Reestructuración de SAS, que implica, entre otras cosas, la participación de los estados dinamarqués y sueco. En realidad, ese aporte ya se concretó y lo que llega ahora, con algo de retraso, es el visto bueno de las autoridades continentales que determinan finalmente que esas inyecciones de dinero son “compatibles con las normas de ayuda estatal aplicables”. Cabe recordar que SAS se encuentra sumida aun en un proceso de reorganización bajo la protección del Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos. “Los acreedores refirieron que previamente a la aceptación y el apoyo del Comité Oficial de Acreedores No Asegurados al plan, se subraya la confianza en la dirección tomada por SAS, con un llamado firme a todos los acreedores no asegurados para que aprueben el plan propuesto”, explica un comunicado. Y continúa: “Este respaldo es un testimonio del delicado acto de equilibrio que SAS intenta mantener mientras navega por las turbulentas aguas de la reestructuración financiera bajo la protección del Capítulo 11”.
Respaldo formal al Plan de Reestructuración de SAS

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