La participación argentina en la 42ª Asamblea de la OACI dejó «tela para cortar». Oscar Villabona, titular de la ANAC expuso la necesidad de impulsar un «Cielo Único» sudamericano y esbozó críticas al organismo al que consideró «juez y parte».
“La OACI siempre ha manifestado, y lo compartimos, la inconveniencia que un regulador preste servicios. No se puede ser juez y parte. Así, decenas de países hemos modificado nuestra estructura organizacional; sin embargo, la OACI, además de primer regulador global, se ha convertido en prestador de servicios onerosos. Presta servicios de consultoría o asistencia técnica para preparar a los países ante auditorías que la propia organización genera. Varios países hemos advertido que muchos de sus auditores se apartan de las reglas elementales de la auditoría, y luego, la propia organización presta nuevos servicios para poder levantar hallazgos arbitrarios que los sustentan. Esta mecánica tiene notas de marcada arbitrariedad que afectan claramente la ética y la transparencia de los procesos componentes. Estamos convencidos que la OACI no puede ser regulador y prestar servicios económicos sobre aquello que regula, pues contradice su esencia y se desprestigia, propiciando así un escenario contrario a su visión original. Asimismo, hemos advertido profundas asimetrías de criterios entre nuestra regional y la sede central de la OACI en esta ciudad. Entonces, con preocupación y ánimo de mejorar el sistema, nos preguntamos, por ejemplo, ¿cuáles son los aportes del SRCVSOP? La respuesta, lamentablemente, es su altísimo costo indirecto, ineficiencia, ineficacia y opacidad de procesos. Por ello, seriamente estamos analizando suspender la participación a dicho sistema, que se ha desvirtuado si no se volviese a sus fuentes. Queremos confiar que la Secretaría General, las regionales y el Consejo arbitren medidas para que se transparente y profesionalice el tratamiento de las evidencias aportadas por el Estado. Por ello, apoyamos fervientemente las notas y las inquietudes de numerosos países que buscamos agilizar y modernizar a la OACI. Para finalizar, con modestia, somos conscientes y autocríticos de los errores del pasado de nuestro país, pero tenemos la convicción y el capital humano suficiente para construir un futuro próspero de libre mercado que permita, finalmente, ampliar las libertades de nuestra sociedad y del sistema aeronáutico de cielos abiertos, en la Argentina y la región, con apego a la seguridad operacional”.
Recordemos que la Argentina fue reelegida para integrar el Consejo de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) en Canadá con 150 votos, superando la cantidad obtenida en la asamblea anterior y consolidando así su permanencia ininterrumpida en el Consejo desde la creación de la OACI.
La delegación argentina pidió a su vez modernizar y desburocratizar el funcionamiento de la OACI, en línea con el mensaje del presidente Milei en la ONU. Además, se presentaron notas de estudio como la revisión del Convenio de Chicago.