El Tribunal de Quiebras de Estados Unidos aprobó la reestructuración financiera de Azul Linhas Aéreas, como paso inicial del denominado Capítulo 11. El proceso implica unos US$ 1.000 millones en el procedimiento de Debtor in possession (DIP) por parte de Azul. “Durante este mes se llevará a cabo al menos una audiencia adicional para obtener más aprobaciones”, indicó la compañía en un comunicado. “Seguimos enfocados en finalizar el plan de reestructuración, el cual le permitirá mejorar su situación financiera y posicionar el negocio a largo plazo”, continúa el texto. A finales de mayo la operadora sudamericana se acogió al Capítulo 11 con el objetivo de eliminar más de US$ 2.000 millones en deuda financiada, un DIP de aproximadamente US$ 1.600 millones y la posibilidad de obtener hasta US$ 950 millones en nuevo capital al salir del proceso. Al momento de anunciar su entrada al Capítulo 11, Azul aseguró que continuará operando normalmente durante el proceso, con el respaldo de acuerdos de apoyo a la reestructuración firmados con sus principales acreedores y socios estratégicos, incluidos sus actuales tenedores de bonos; su mayor arrendador, AerCap, y las aerolíneas United Airlines y American Airlines. “Azul continúa volando, hoy, mañana y en el futuro. Estos acuerdos marcan un paso significativo en la transformación de nuestro negocio y nos permitirán emerger como un líder de la industria”, afirmó en su momento John Rodgerson, director general de la aerolínea.
El Tribunal de Quiebras de Estados Unidos dio luz verde para la reestructuración financiera de Azul Linhas Aereas
NOTAS RELACIONADAS