IATA apuesta a que el sector de las aerolíneas complete la recuperación el próximo año, en 2023, cuando vuelva a obtener beneficios. Esto se debe fundamentalmente, a los altos niveles de empleo y crecimiento en economías clave que sostienen la demanda incluso en un marco inflacionario y golpeado por la guerra en Ucrania. “Seguimos en vías hacia la rentabilidad. Lo revisaremos, pero no preveo cambios importantes”, dijo Willie Walsh, director General y CEO de IATA. La recuperación en el tráfico de pasajeros también debería continuar el próximo año a pesar de los obstáculos económicos, antes de volver a los niveles previos al Covid en 2024. A modo de contraste, al cabo de 2022, se espera que las aerolíneas registren un déficit colectivo de US$ 9.700 millones este año dado que un verano (bóreal) excelente no logró compensar las pérdidas registradas a principios de 2022 cuando los vuelos se vieron interrumpidos por la variante ómicron del Coronavirus, señaló Walsh, al reiterar un pronóstico emitido por primera vez en junio.