Los sindicatos que representan a los Tripulantes de Cabina de Pasajeros (TCP’s) de Ryanair, y que tienen como base diversos países, anticiparon la posibilidad de que convoquen a una gran huelga contra la dirección de la compañía, en el próximo verano europeo. En concreto, rige un ultimátum hasta el 30 de junio, para que la low cost irlandesa responda a sus demandas. Las españolas USO y Sticpla, la portuguesa Snypac, la italiana UIL y la belga CNE, concretaron recientemente un encuentro para diseñar una estrategia común. El principal pedido es que Ryanair aplique la legislación nacional de cada país en los que opera y que unifique las condiciones laborales tanto para los empleados propios como para los TCP que tiene subcontratados.
