Swiss, Austrian y Lufthansa, todas líneas aéreas del grupo Lufthansa, decidieron dejar sin efecto la medida de “dos personas en cabina”, que pusieron en vigencia tras el episodio que involucró a un piloto de A320 de Germanwings que estrelló voluntariamente su avión en los Alpes. La disposición establecía que en ningún momento del vuelo puede quedar una sola persona en la cabina de pilotaje (piloto o copiloto), que en caso de que uno de ellos debiera abandonar la cabina, una tripulante de cabina debía ingresar para que, justamente, nunca quedara una sola persona en la cockpit.
