Esta semana entraron en vigencia nuevas políticas de control de equipaje en la Unión Europea que conducen a un análisis más minucioso de las valijas y bolsos de mano. Más allá de mantener la prohibición a transportar líquidos y geles de cierto tamaño, se pondrá a partir de ahora una especial atención a los aparatos electrónicos. Obviamente, los controles más exhaustivos generan un mayor tiempo, y costos adicionales. La autoridad aeroportuaria española, AENA, por ejemplo, reveló que el cambio de postura representa un gasto extra de € 17 millones anuales. A partir de ahora, los dueños de computadoras portátiles y otros aparatos deberán sacarlos del equipaje de mano y colocarlos aparte
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