Acuciada por sus deudas y déficit, Mexicana de Aviación le pidió hace casi cinco años un préstamo a Banorte. Como garantía de pago, la transportadora decidió poner, entre otros activos, la propiedad de algunos Airbus A320. El impago del crédito le brindó la propiedad de dichas máquinas al banco. Esas aeronaves hoy se convertirán en el principal recurso para que, mediante su venta, se pueda asumir la liquidación pendiente para unos 8.500 trabajadores. Así lo confirmó el Secretario de Trabajo y Previsión Social de México, Alfonso Navarrete Prida. De hecho su cartera, junto a la de Telecomunicaciones y Transporte, actuarán como auditoras del proceso de liquidación de Mexicana. El funcionario además, abonó la idea de que la marca Mexicana en sí tiene mucho valor. “Puede haber aerolíneas que estén ahorita funcionando comercialmente, que les interese usar la marca, o podrá haber un nuevo inversionista que abra una nueva aerolínea que inicie de nueva cuenta, que se llame Mexicana”
