Como consecuencia del incidente que protagonizara un B-787 Dreamliner de Ethiopian Airlines en el aeropuerto londinense de Heathrow, Boeing le recomendó a todas sus aerolíneas clientes que revisen las balizas de emergencias. El dispositivo lumínico, fabricado por Honeywell, es señalado preliminarmente como el responsable del principio de incendio. La curiosidad es que el pedido no involucra sólo a la flota implicada, el B-787, sino también a las de B-717, B-737NG, B-787/400, B-767 y B-777. El pedido es consecuencia directa de los datos preliminados relevados por la Oficina de Investigaciones Británica de Accidentes de Aviación (la AAIB por sus siglas en inglés). La baliza cuestionada tiene como objetivo ayudar a la localización de la aeronave en caso de un accidente aéreo. Estimaciones de la industria señalan que serían unos 1.200 aviones de Boeing los que utilizan este tipo de baliza. Por otra parte, la dirección de Boeing decidió cesar a Mike Sinnett de su cargo como vicepresidente de Ingeniería e ingeniero jefe del Programa 787 Dreamliner, debido a los recientes fallos técnicos descubiertos en este modelo. Sinnett, que desde el principio dirigió el proyecto Dreamliner, ocupará “un cargo menos estresante”, y será vicepresidente para el desarrollo de productos, lo que significa que se dedicará a desarrollar ideas para futuras generaciones de aviones y no participará en la producción de los modelos ya elaborados.
