La aerolínea brasileña Gol envió el viernes de la semana pasada telegramas de despido a 18 empleados que atienden sus vuelos en Aeroparque y Ezeiza. La reacción de los gremios fue instalar un campamento frente a los mostradores de check-in en el aeropuerto de Ezeiza, los que provocó demoras en vuelos de varias aerolíneas. También afectaron los vuelos este lunes una serie de asambleas que incluyeron a personal de Intercargo y Aerohandling. Ese día directivos de la Asociación de Personal Aeronáutico y la empresa se reunieron en el Ministerio de Trabajo pero no lograron destrabar el conflicto -la empresa se negó a dar marcha atrás con la medida- lo que generó una amenaza de paro, a esa altura no solo para la empresa sino para la atención de todos los vuelos en todas las terminales aéreas del país. El gremio había amenazado con iniciar un paro a las 18 horas de ese día si el ministerio no decretaba la conciliación obligatoria que retrotrajera la situación a antes de los despidos. Ese día los vuelos de Gol salieron en ferry rumbo a Brasil. La medida, como quería el gremio, finalmente fue dispuesta y los empleados, por ahora, reincorporados, aunque la empresa insiste en que no dará marcha atrás.
