Un informe elaborado por la consultora especializada en pensiones Destiny, con el que cuentan los propios consejeros españoles, advierte sobre la exposición de Iberia al déficit de pensiones de su socia, British Airways, que en el momento de la fusión -en el año 2010- suponía el 603% del valor en Bolsa de la compañía. Aunque uno de los compromisos de la fusión era reducir dicho déficit de manera progresiva desde los 4.500 millones de euros de partida, pero el agujero de las pensiones hoy supone un 562% para el holding en el que también figura Iberia, al superar los 5.000 millones de euros. Esto pese a las aportaciones ya realizadas de unos 762 millones de euros. El informe fechado el 13 de enero, que fue encargado por el fondo mutual de los trabajadores de Iberia, advierte que dada la potestad del regulador británico para obligar al grupo IAG (y no únicamente a British) a cubrir los desequilibrios en el sistema de pensiones, la compañía española se podría ver seriamente perjudicada. Para la consultora, que define a la británica como “un gran fondo de pensiones” o “una compañía de seguros de jubilación que tiene asociada una aerolínea”, los resultados de Iberia en 2011, que se emplean para justificar el severo plan de ajuste propuesto, poseen un “carácter coyuntural y menor comparados con el tema de las pensiones”.
