A partir de ahora, si una línea aérea quiebra, podrá seguir volando. La legislación noruega acaba de cambiar y no son pocos los que señalan que es una norma hecha a la medida de la situación de Norwegian Air. Desde el cambio, si la compañía no logra reestructurar su deuda actual, para acogerse al programa de ayudas planteado desde el gobierno de Oslo, podrá seguir operando. La modificación legal fue aprobada de modo unánime por el Parlamento Noruego el viernes pasado y según diversos voceros, se equiparó la norma al famoso Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de los Estados Unidos. “Hemos tramitado esta propuesta con rapidez para que también rápidamente se pueda reorganizar la compañía de forma integral. Ahora Norwegian tendrá un marco legal que le puede ayudar a disponer de tiempo para organizarse”, comentó Lene Vagslid, presidente de la comisión parlamentaria.
